
En la Segunda Guerra Mundial apareció una nueva arma (muy superior al antiguo espionaje), la infiltración. Funcionarios y militares que teóricamente combatían a favor de Alemania, pero que en realidad buscaban derrotarla “por dentro”.
En la Segunda Guerra Mundial apareció una nueva arma (muy superior al antiguo espionaje), la infiltración. Funcionarios y militares que teóricamente combatían a favor de Alemania, pero que en realidad buscaban derrotarla “por dentro”.