Ofrecemos aquí dos "manuales de instrucciones" para acumular deudas con elegancia y no pagarlas sin decadencia.Se trata de dos escritos que revelan sendas formae mentis: una más política, otra más pilla.
Una que construye políticamente el derecho a tomar prestado (y no devolver), otra que lo hace teológicamente: un derecho económico que nace del agravio social o un derecho humano inscrito en la naturaleza del hombre, hecho a imagen y semejanza del Creador.
Una que da pie a todo un sistema de economía política, otra que revela unas fuentes para el sustento de la economía doméstica: un principio general de redistribución responsable de las riquezas o un recurso para vivir alegremente a costa de lo ajeno. Pero, más allá de la fundamentación teórica del empréstito gratuito, ambos escritos proporcionan valiosos consejos para proceder -ya sea al modo italiano o a la moda francesa- por los vericuetos de esta siempre importante faceta del mundo de las finanzas.