1a edición, Editorial EAS (2020)
Tapa blanda
15cm x 21cm, 208 páginas
El estruendo de la batalla de Berlín no terminaba aún de aplacarse cuando el nacionalsocialismo junto a su líder Adolf Hitler se encaminaban a transformarse en mito y leyenda. Y es que el nacionalsocialismo no fue tan sólo una idea política más, sino que fue también un movimiento popular que desde siempre mantuvo un halo capaz de producir en el alma humana emociones insondables, un sentimiento que se magnificó con la desaparición física del Reich.
Parte del grupo que dio origen a la cosmovisión nazi provenía de círculos imbuidos de lleno en un proceso de revalorización del pasado germánico y su cultura pagana. Antiguos símbolos germánicos como las runas, o las expresiones culturales ideográficas de la gran rama indoeuropea como la swástika o la rueda solar, además de viejas sagas y el eco de los dioses paganos, estuvieron presentes en el caldo de cultivo inicial del nacionalsocialismo como forma de revalorizar un pasado cultural exclusivo a la singularidad germánica.
Pero toda esta simbología y el rescate de los mitos y tradiciones fueron utilizados dentro de los márgenes de la cosmovisión biologista por lo que nunca se alzaron con vida propia como forma de presentar una alternativa ideológica paralela a la de cuño evolucionista.
Fue bajo esta dinámica de los acontecimientos que figuras como Miguel Serrano y Savitri Devi, sin ninguna relación entre ellos, fueron conmovidos e impactados por el drama seudo-mitológico del nacionalsocialismo asumiendo la tarea de realizar una especie de revalorización del halo espiritual que rodeó ese verdadero "Crepúsculo de los Dioses".